En la parte delantera del local, el espacio es generoso, lo que permitió incluir muchos tipos de plantas en esos 100 metros cuadrados de jardín vertical. Una vez dentro de la tienda, el jardín continúa: plantas en puntos estratégicos y al fondo encontramos un pequeño patio acristalado donde el sol ilumina las plantas situadas en la parte superior, dejando en sombra la zona inferior.
En noviembre de 2011 publiqué una entrada en la que recogía una noticia sobre este jardín creado por Vertical Garden Design en Barcelona. Se inspiraron en las cascadas como punto de comienzo natural para el diseño de las plantas que se incluirían en el jardín vertical. Fisuras y grietas en la roca, agua corriendo, además de esculturas y otros elementos para ofrecer contraste. Se pueden ver begonias, helechos de diferentes variedades, así como pequeñas y grandes aráceas; todo ello con el propósito de imitar esa vegetación que suele crecer en los acantilados de costas, cascadas y cuevas. El efecto es realmente fabuloso.
Lo era entonces, a juzgar por las fotografías publicadas en su día, y doy fe de que lo es ahora, porque el miércoles pasado, en un viaje relámpago a esa ciudad, tuve la oportunidad de verlo y, sin ánimo de hacer publicidad a esta firma de ropa, tengo que admitir que la tienda es espectacular, el jardín vertical y el del patio interior están bien conservados, supongo que algunas bajas inevitables, pero es realmente gratificante sentirse rodeado de tanta vegetación exuberante en un espacio cerrado en medio de la urbe.
Por supuesto este ejemplo, que en su día era novedoso, afortunadamente hoy es más frecuente. No siempre tiene que ser un jardín vertical. A veces, una simple jardinera es suficiente para crear un espacio más cálido. Todo va en gustos y en presupuestos y, por descontado, hay plantas y diseños para todos esos gustos y presupuestos. La creatividad es lo que le acabará dando un signo distintivo a esa ‘puesta en escena’. Habrá que inventarse cosas para teñir de verde los espacios que ocupan la ciudad, nos lo merecemos.
