Cattleya orchid and three hummingbirds, 1871 •• Martin Johnson Heade •• National Gallery of Art |
El pintor norteamericano Martin Johnson Heade comenzó una serie de pinturas de orquídeas y colibríes después de su último viaje a Sudámerica en 1870. Flores y aves tropicales que a menudo colocaba en entornos evocadores y fantásticos.
Martin Johnson Heade (1819-1904) nació en Lumberville, Pensilvania (EEUU). Cuando era niño desarrolló una autoproclamada fascinación «monomaníaca» con los colibríes (Trochilinae), una fascinación que se intensificó cuando viajó por primera vez a Brasil en 1863 para observarlos y pintarlos. Tenía la intención de publicar «un álbum grande y elegante» de litografías basadas en sus pinturas brasileñas de colibríes, que presentaban pequeñas viñetas de pares de aves en sus hábitats locales. No pudo asegurar las doscientas suscripciones necesarias para imprimir sus «Gemas de Brasil», pero su interés en los colibríes continuó a lo largo de su carrera, desarrollando composiciones cada vez más complejas y completas.
Aunque sus comienzos fueron como retratista y se dedicó tardíamente a la pintura de paisaje, sus viajes a América del Sur hicieron que la exuberancia fértil de los paisajes encontrados despertase su interés por expresar en sus pinturas la relación del hombre con la naturaleza. En su pintura de paisaje representó marismas, paisajes marítimos y colibríes, pero, en los años posteriores a su tercer y último viaje a Sudamérica, en 1870, pintó unos cincuenta y cinco lienzos que incorporaban orquídeas en sus pinturas de aves.
La locura por las orquídeas que se extendió por Europa y Estados Unidos a mediados del siglo XIX (ver más aquí) llevó a escritores y artistas a utilizar a esta flor tropical en sus obras, en ocasiones como mera inspiración y en otras con clara alusión a la sexualidad femenina.
Martin Heade no fue ajeno a esa fiebre de las orquídeas, pero incorporaba también su punto de vista naturalista: «Solo nueve años antes, Darwinhabía elegido la orquídea para demostrar la anatomía evolutiva en su libro ‘Sobre las variadas estrategias por las cuales las orquídeas británicas y foráneas son fertilizadas por insectos, y sobre los buenos efectos de la polinización cruzada’ (La fecundación de las orquídeas), donde expone los diferentes modos en que las orquídeas son fertilizadas por insectos. Sorprendió al mundo al describir la orquídea no como un espécimen estático hecho perfecto por Dios en la creación, sino como parte de una familia de plantas que exhiben ingeniosos dispositivos que se han modificado con el tiempo para asegurar la fertilización cruzada». Heade estudió colibríes y orquídeas con el ojo de un naturalista, señalando durante su estancia en Brasil que «probablemente no haya un país donde una persona interesada en ornitología, entomología, botánica, mineralogía o paisajes hermosos pueda encontrar tanto para entretenerlo».
Desde el punto de vista artístico, lo que hace especialmente originales sus combinaciones de orquídeas tropicales y colibríes, que al fin y al cabo era un tema ampliamente ilustrado, reside en el formato y el tema elegidos por Heade. Las orquídeas se pueden ver de cerca porque sus flores aparecen ampliadas en primer plano con (por lo general) un par de colibríes, a veces suspendidos en el aire y otras posados. Detrás de esa escena aparece siempre un paisaje evocador y creíble, donde las vistas de la selva húmeda se abren al cielo distante. En ocasiones, incluso, aparecen finas cortinas de lluvia que filtran la luz.
Heade creía en la necesidad de preservar la vida silvestre y mostró sus colibríes y orquídeas como especies, integrándolas en espacios específicos como partes integrales de la construcción del paisaje.
Hoy muestro algunas de esas pinturas que nos van a permitir acercarnos a la obra de Heade, un artista que no fue ampliamente conocido durante su vida y en los primeros años del siglo XX estuvo a punto de ser olvidado, pero cuyo trabajo atrajo la atención de académicos, historiadores del arte y coleccionistas durante la década de 1940.
Hoy muestro algunas de esas pinturas que nos van a permitir acercarnos a la obra de Heade, un artista que no fue ampliamente conocido durante su vida y en los primeros años del siglo XX estuvo a punto de ser olvidado, pero cuyo trabajo atrajo la atención de académicos, historiadores del arte y coleccionistas durante la década de 1940.
White orchid and hummingbird, 1875-1890 •• Colección particular |
Orchid with Two Hummingbirds, 1871 •• Reynolda House Museum of American Art |
Cattleya Orchid, Two Hummingbirds and a Beetle, 1875-1890 •• Crystal Bridges Museum of American Art |
Hummingbird and Two Types of Orchids, 1890-1904 •• Colección particular |
Orchids and Hummingbirds, 1875-90 •• Colección particular |
Two angel hummingbirds on a branch near two orchids, 1890-1904 •• Colección particular |
Two hummingbirds with an orchid, 1875 •• High Museum of Art |
Orchids and Spray Orchids with Hummingbirds, 1875-1890 •• Museum of Fine Arts, Boston |
Orquídea y colibrí cerca de una cascada, 1902 •• Museo Nacional Thyssen-Bornemisza |
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