Grandes ilusiones y muchas intervenciones en el distrito de Tetuán de Madrid dentro del proyecto de mejora del paisaje urbano denominado “Paisaje Tetuán”.
El proyecto “Paisaje Tetuán”, iniciado en 2013, se creó con la idea de mejorar el entorno urbano de algunos de los barrios de un distrito, Tetuán, en Madrid, que se caracteriza por tener una alta densidad urbana y una estructura mixta, con barrios de muy diferentes tipologías. Entre ellos, el proyecto “Paisaje Tetuán” centró sus propuestas en zonas donde conviven espacios de casas bajas, las primeras casas del barrio, con edificios altos, modernos, sin apenas encanto; así como numerosas y frías medianeras.
Dentro de ese proyecto se han realizado 19 intervenciones y más de 10 talleres, y actividades en los que participaron artistas, colectivos artísticos e iniciativas ciudadanas. Este vídeo muestra todo el proceso, presentado por algunos de sus protagonistas.
Hay otro vídeo que habla de la “Huertita de Tetuán”, el germen de “La huerta de Tetuán” inaugurada hace algo más de un año y que forma parte del proyecto «Paisaje Tetuan».
De la «Huertita de Tetuán» sus creadores dijeron que es “la historia de cómo un pequeño cambio acabó cambiando un barrio y aún no ha terminado de hacerlo. Es la historia de un efecto mariposa aplicado a las personas y a los espacios, de una emoción colectiva y de una casualidad. Un pequeño solar abandonado entre dos edificios convertido en huerto urbano en el distrito de Tetuán de Madrid. Este diminuto espacio verde en medio de la ciudad acabará convirtiéndose en toda una metáfora para los vecinos”.
De la «Huertita de Tetuán» sus creadores dijeron que es “la historia de cómo un pequeño cambio acabó cambiando un barrio y aún no ha terminado de hacerlo. Es la historia de un efecto mariposa aplicado a las personas y a los espacios, de una emoción colectiva y de una casualidad. Un pequeño solar abandonado entre dos edificios convertido en huerto urbano en el distrito de Tetuán de Madrid. Este diminuto espacio verde en medio de la ciudad acabará convirtiéndose en toda una metáfora para los vecinos”.
Os recomiendo ver ese vídeo que nos lleva hasta ese diminuto huerto urbano. Un pequeño espacio lleno de caras sorprendidas, la de algunos urbanitas; también se escapan algunas manos expertas, la de las personas mayores que no han olvidado sus orígenes. Pero lo mejor, sin duda, es la cara, las manos y la alegría de los niños.
Esa es la esencia, por supuesto, más allá de lo rica que sepa esa lechuga fresca, cultivada con cariño. El final es triste porque ese espacio se tuvo que desmantelar, ya que la propietaria del terreno quiere edificar en él. Pero es una tristeza efímera porque, hace algo más de un año, los vecinos inauguraron su nueva huerta: «La huerta de Tetuán», con sus frutos y sus alegrías.
Sin duda, la participación ciudadana es el camino para construir paisajes urbanos que invitan a pasear por ellos y sentarse a charlar.
Fotos: Intermediae y La Huerta de Tetuán