The waterwheel, Javea – J. Sorolla, 1900 |
Sorolla expone por primera vez en París en 1906 y lo hace en la galería Georges Petit, una de las principales promotoras de los impresionistas.
Parece ser que ese evento logró establecer la reputación internacional de Sorolla. Un Sorolla cuyo trabajo, afortunadamente, está cada vez más reconocido a nivel internacional y algo más a nivel nacional. Sorolla se hace más grande, si cabe, y su luz cada vez más intensa.
Para los amantes del arte en general, de la pintura en particular y de Sorolla, como yo, traigo una noticia de esas que iluminan la mirada. Se trata de una exposición itinerante: “Sorolla y París” .
En esa exposición se exhibirán un centenar de pinturas, incluidos algunos bocetos. Recorrerá el Musée des Impressionnismes de Giverny (no está nada mal…), la Kunsthalle de Múnich (bien…) y el Museo Sorolla de Madrid (qué voy a decir… ¡ah sí!, que este año cuenta con cinco cuadros nuevos). Los cuadros que se incorporan al Museo Sorolla de Madrid son el retrato de su hija Elena “Elena en la Playa”; “Jardines del Alcázar de Sevilla en invierno”; “El bote blanco. Jávea”; “Sombra del Puente de Alcántara. Toledo” y “Playa de Valencia”, procedentes de una colección privada estadounidense, que llegarán al museo la próxima semana, donde permanecerán hasta enero de 2016. Será entonces, cuando se trasladen, junto con el resto de pinturas, a la exposición “Sorolla y París” (título provisional).
Falta mucho, pero se hará corto. No hay más datos todavía, salvo la fecha de la primera exposición en el Musée des Impressionnismes Giverny –14 de julio a 6 de noviembre de 2016-. Si os interesa esta exposición y creéis tener la posibilidad de viajar a una de esas tres ciudades (o a las tres) en 2016, permaneced atentos al blog, porque habrá más. Mientras tanto, y para ir abriendo boca, marchando una de Sorolla, mi favorito (bueno, uno de ellos). ¡Feliz fin de semana!