Londres, para los que residen allí de toda la vida, supongo que será su ciudad, sin más, sin excesivo misterio, puesto que lo que se convierte en rutina a veces cae en el olvido de las emociones. Sin embargo, muchos de los que hemos vivido en esta ciudad por un corto período de tiempo, la percibimos como un lugar de referencia, un muestrario de sensaciones visuales, repertorio de experiencias vitales y, por supuesto, un referente cultural. Londres es una ciudad grande en todos los sentidos.
Por eso, no es de extrañar que hayan importado el concepto del High Line que tanta fama, desde el punto de vista paisajístico y medioambiental, ha dado a Nueva York. Y lo han hecho entrando por la puerta grande, como no podía ser de otra manera.
El High Line de Nueva York reclamaba un tramo de ferrocarril que estaba abandonado para poder crear un parque urbano. En este caso, The Landscape Institute, el Ayuntamiento de Londres y el Garden Museum organizaron un concurso en el que se plantearan diferentes alternativas e ideas para la creación de una infraestructura verde en esta ciudad: High Line for London Competition
La intención es recurperar lugares escondidos, olvidados o abandonados y devolverles un uso público en forma de espacios verdes. A esa convocatoria se presentaron más de 170 propuestas y, de todas ellas, ayer 8 de octubre se seleccionaron 20 bocetos. En ellos hay arquetipos y modelos que incluyen transformaciones de ríos subterráneos de Londres, pasos elevados y túneles en desuso que vuelven a tener vida. Creaciones de bosques en miniatura, parques y jardines flotantes. Y, por supuesto, edificios de oficinas cubiertos de verde.
Si la ciudad no puede trasladarse al campo, habrá que hacer más bucólicas las ciudades, porque a estas alturas, todos somos conscientes de que que la vida en el asfalto es dura y cada vez más insostenible. Pero, sobre todo, es intolerable que los espacios públicos se llenen de edificios fantasma y elementos inútiles, que restan encanto y calidez a las ciudades. Pensar en este modelo de ciudad no es una idea descabellada, sino brillante y, desde luego, sería muy interesante que se convirtiera en un proyecto viable.
Os muestro algunas de las 20 creativas propuestas seleccionadas en este concurso.
Para conocer más detalles de los bocetos presentados: