Ya sé, estamos en plena canícula. La primavera se ha marchado hace ya muchos días, pero la nostalgia es la nostalgia y Neruda es Neruda, está siempre aquí, con nosotros, como el amor, que nunca se escapa. Mirad si no, cómo lucen los graffitis que se pintan con el corazón, algunos ya muy populares, objeto de los disparos fotográficos de los turistas, como el de Salamanca.
Las noches de verano son como los días en primavera, siempre llenos de ganas de vivir, así que, podíamos emborrachar nuestro corazón con arte urbano, del que se crea con espíritu de primavera, y que se disfruta como nunca en las noches de verano. Pensemos que somos uno de esos afortunados a los le han hecho una declaración de amor pública con tanto arte, y vamos a celebrarlo por todo lo alto. O soñemos con ser niños que juegan al escondite en la calle. Imaginemos cualquier cosa que nos ilumine nuestra mirada o nos haga sonreír. Venga, no es tan dificil. Vamos a probar con estas imágenes.