Azuma Makoto •• Ryot
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En Japón hay cientos de escuelas de arreglos florales, sin embargo, el artista floral Azuma Makoto ha creado su inconfundible sello, un estilo libre, con trabajos que logran que las flores se presenten más vivas de lo que ya son.
Azuma Makoto encuentra hasta música en las flores y lo mejor de todo es que sabe expresar eso que descubre, para que nosotros también lo apreciemos. Es conocido por sus sorprendes arreglos florales y esculturas botánicas. Sus instalaciones son tan creativas que en ocasiones resulta imposible averiguar cómo ha conseguido esos efectos tan espectaculares.
De todos sus trabajos, reconozco que tengo un especial cariño a su delicioso corto de animación, Story of Flowers, una historia acompañada del trabajo de la ilustradora Katie Scott, que a él le sirvió para explicar a su hija de 5 años cómo funcionan las plantas en la naturaleza. A nosotros nos hizo emocionar. En su momento publiqué ese vídeo en el blog y hoy en día sigue recibiendo visitas, porque su extraordinaria belleza no tiene fecha de caducidad.
Jardins des Fleurs • Alta costura
Pero hoy estoy especialmente interesada en fijarme en los trabajos realizados en Jardins des Fleurs, el taller de flores que Azuma Makoto fundó en 2001 en Tokio, junto con el fotógrafo Shunsuke Shiinoki. Un taller que muchos pueden considerar algo gris, que el artista convirtió en su laboratorio, llenando de calor (y color) ese lugar donde se cocinan las recetas más extravagantes y coloristas, y las fotografías y vídeos más sorprendentes. Fue a partir de entonces, cuando se hizo internacionalmente famoso, especialmente gracias a las esculturas botánicas que ha expuesto en diferentes ciudades del mundo.
Su experiencia comenzó antes. En realidad es un artista autodidacta que aprendió buscando cada día la forma de expresar a través de la belleza de las flores.
Azuma Makoto (Fukuoka Prefecture,1976) llegó a Tokio en 1997, donde debutó en una banda de rock. Las actividades en la banda las compaginaba con su trabajo como comerciante en Ota Market, uno de los mercados de flores y plantas ornamentales más grandes que hay en Japón. Conectó con las flores, eso ya lo hemos descubierto, y su atracción hacia ellas le llevo al siguiente trabajo, en esta ocasión como encargado de una floristería en un supermercado de Azabu-Juban. Allí trabajó desde 1999 hasta que abrió su taller, Jardins des Fleurs, en 2001.
En Jardins de Fleurs los arreglos y decoraciones florales se preparan prestando especial atención a los detalles de la persona que va a recibirlo disfrutarlo. No hay reglas marcadas y se personaliza de tal manera que se podrían considerar de “alta costura”. El color como hilo conductor, el paso del tiempo como aliado y la libertad de expresión como forma de trabajar con las flores. “Haz lo que quieras, sigue tu propia estrella” podría ser una frase suya, pero es de Constance Spry, quien, con diseños a base de orquídeas verdes, bayas y ramas otoñales logró romper moldes y revolucionar el arte floral en su época, del mismo modo que lo hace hoy en día él.
En el sitio web de Jardins des Flowers suele publicar una foto por cada mes de año, cuyos colores se presentan en armonía con lo que pretende comunicar la estación del año a la que corresponde. Una combinación de flores blancas con las que terminó el año 2017, para comenzar 2018 con el color verde fresco del mes de enero, pasando por diferentes combinaciones, hasta llegar a diciembre de 2018 con flores de color rojo intenso y reluciente como las bayas de acebo.
Flora Magnifica
Además del taller, Azuma Makoto y Shunsuke Shiinoki han colaborado en tres volúmenes de Encyclopedia of Flowers y hace unos meses salió a la venta su último libro Flora Magnifica, The Art of Flowers in Four Seasons.
Para crear Flora Magnifica han seleccionado cientos de especies de plantas, organizándolas en combinaciones sorprendentes que nunca podrían ocurrir en el mundo natural, y con la que llegan a crear una estética floral única. De este modo, las imágenes, ricas en color y textura, nos muestran cómo la naturaleza y el artificio se mezclan hábilmente. Un arte en el que se mueven como pez en el agua.
Como lo hace en las fotografías que representan composiciones florales mes a mes, en el libro se muestra la frescura y la nueva vida de la primavera, la exuberancia y la abundancia del verano, la grandiosidad del otoño y las sombras cada vez más profundas del invierno. Es el arte de las flores en cuatro estaciones.
La sensualidad de los pétalos que se abren o la elegancia de las frondas de helecho son algunas de las perlas de este libro, que presentan como meditativo e inspirador, capaz de cautivar a todos los amantes de la naturaleza y el arte. Está claro que es un libro para regalar, o, mejor aún, para que nos regalen.
fotoS AZUMA MAKOTO, ryot y japan house, London
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