Hay quien no necesita fijarse en lo que hacen los demás para brillar con luz propia, del mismo modo que hay quien no es capaz de brillar por más bombillas que encienda y por más luz que quiera robar.
Plantas que brillan con luz propia
Con las plantas sucede lo mismo, hay especies de plantas que atrapan la mirada siempre. Pero, cuando uno cree que ya se ha acostumbrado a ellas; que ya no le sorprende del mismo modo que la primera vez que la admira, un detalle hace que vuelvas a sentir emoción, hasta el punto de repetir una y otra vez, qué belleza, qué maravilla. Porque hay plantas que siempre brillan con luz propia y se las puede ver desde la distancia.
Una buganvilla (Bougainvillea), esa planta veranera donde las haya, que despierta amor (por su belleza) y, en ocasiones, odio (por lo que enreda y pincha), ha vuelto a emocionarme ayer, después de llevar años observándolas, admirándolas y fotografiando sus colores vivos, colores ardientes, rojos, rosas, púrpura… Mucho tiempo, y de repente, el blanco. Mi emoción se renovó y mi mirada volvió a iluminarse.
Pasaba por allí… y no pude resistir traeros fotos para disfrutarla todos. Si no me equivoco, se trata de una Bouganvillea glabra «Snow White». Si me equivoco, se llamará como sea, pero lo que si os puedo asegurar es que ayer ofrecía un bellísimo espectáculo, de esos que suelen ofrecer las plantas cuando les gusta el lugar, cuando están donde tienen que estar.
