Calibrachoa: en el origen y en el patio o terraza

Calibrachoa MiniFamous Double PinkTastic

Calibrachoa es un género de plantas con alto valor ornamental y económico, debido a la existencia de muchas variedades comerciales exitosas para su uso en el jardín y, muy especialmente, para el cultivo en maceta, en patio, terraza o balcón.

Género Calibrachoa

Históricamente el género Calibrachoa estuvo incluido en el género Petunia debido a similitudes morfológicas. Sin embargo, ahora se consideran dos géneros separados, después de que sucesivos estudios hallaran que hay importantes diferencias cromosómicas y de conductas de reproducción entre calibrachoas y petunias.

El género fue descrito por Vicente Cervantes y publicado en 1825. Recibió su nombre de Antonio de la Cal y Bracho, un botánico mexicano del siglo XIX. Lo integran 32 especies de plantas de la familia Solanaceae y la especie tipo es Calibrachoa procumbens Cerv.

Origen y llegada a Europa

Calibrachoa es originaria de América del Sur(Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay). En su hábitat crecen en climas cálidos y subtropicales, lo que significa que no toleran el calor o el frío extremos, así como la sequía.

La mayoría de las especies presentan porte semiarbustivo y ramas leñosas, pero existen dos especies, que incluyen Calibrachoa parviflora, que son herbáceas.

Calibrachoa parviflora

Aunque son plantas perennes, se cultivan como anuales, es decir, que completan su ciclo de vida (llevan semillas) en una temporada y tienen un período de floración prolongado que se mantiene (en la mayoría de los casos) durante todo el verano.

Las calibrachoas se introdujeron en Europa hace unos 30 años, pero no comenzaron a alcanzar su potencial hasta que una empresa japonesa, Suntory, comenzó a experimentar con la hibridación a finales de los años ochenta. Los primeros cultivares híbridos llegaron a la escena de la jardinería a principios de la década de 1990.

Calibrachoa en el jardin

Hoy en día, casi todos las calibrachoas disponibles en los centros de jardinería y otros puntos de venta son cultivares híbridos.

Hablamos de herbáceas perennes, con diminutas floresparecidas a las de las petunias, que aparecen profusamente de mayo a octubre, incluso más tiempo en climas cálidos, especialmente si nos hemos ocupado de despuntarlas de vez en cuando y retirar las flores marchitas para estimular con ello la floración. Crecen bien a pleno sol. Les gusta el suelo húmedo, pero bien drenado; fértil y preferiblemente ácido.

Los híbridos de Calibrachoa producen muy pocas semillas, menos que la petunia, por lo que es más efectiva la propagación vegetativa mediante esquejes de plantas existentes.

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Son grandes amigas de todo tipo de macetas, contenedores, cestas colgantes y jardineras. Solas o en compañía. Eso, sí, tenemos que vigilar la frecuencia del riego, como sucede con todas las plantas que crecen en maceta, para que no se deshidraten. Además, es recomendable utilizar un sustrato adecuado para cultivo en macetas, con el fin de que la tierra no se compacte. Florecerán más profusamente y se desarrollarán con mejor aspecto, si aplicamos algún fertilizante soluble cada dos semanas durante el periodo de crecimiento vegetativo y floración.

Cultivares y variedades

En la actualidad, están disponibles diferentes cultivares de Calibrachoa hybrida (‘Million Bellls’ ‘Superbells’ ‘Conga’ o ‘MiniFamous’ son algunos grupos) ofreciendo plantas cada vez más mejoradas, colgantes o compactas; y resistentes a enfermedades, como la pudrición de raíz tan común en este género de plantas. Ademas, las nuevas variedades que se incorporan cada año nos llevan a flores sencillas y dobles; y colores que van desde el blanco hasta el rojo más intenso, pasando por rosa, magenta, azul, naranja o bronce.

Dan mucho juego y, sobre todo, mucha alegría, porque las numerosas y coloridas flores nos van a acompañar durante toda la temporada. No es pecado disfrutar de plantas anuales, claro que no. Vamos a ver que aspecto tienen algunos de esos cultivares de Calibrachoa.