Hoy, especialmente, las redes sociales se llena de imágenes y alusiones al equinoccio de primavera en el hemisferio norte y lo museos no iban a ser menos.
Desde el British Museum de Londres nos regala la visualización de los cerezos en flor en primavera, que tradicionalmente constituye uno de los eventos anuales más importantes de la corte imperial de Kyoto.
En esta obra -catalogada entre 1828-1853- del artista japonés Sumiyoshi Hirosada nos muestran una embarcación de recreo, cuyo toldo está primaveralmente adornado también, que pasa, transportando a un grupo de mujeres de la corte, por debajo de los cerezos y en el fondo se puede ver también un sauce (Salix) que brota y las flores amarillas de Kerria, posiblemente japonica, junto a la orilla del río.
La primavera despierta, está en la calle, en el jardín, en al campo y en el calendario. La primavera, cómo no, también, está en el arte.