Hablamos del Palacio del Real, no del Palacio Real, que parece igual, pero no es lo mismo. El Palacio del Real de Valencia fue en su día lugar de residencia para los monarcas de la corona de Aragón y los de la dinastía de los Austria y de los Borbones, cuando visitaban el Reino de Valencia. En 1810 el Palacio del Real fue demolido, antes de la llegada de las tropas francesas de Napoleón, con el fin de evitar que lo convirtieran en una plaza fuerte. Hoy en día los Jardines del Real conservan gran parte de los restos de ese palacio demolido.
Los Jardines del Real tienen su origen remoto en los jardines de este palacio, pero la configuración que hoy conocemos nació entre los escombros, tras su demolición, que el General Elio ordenó amontonar formando dos pequeños montículos que rodeó de macizos. Posteriormente plantaron árboles y flores sobre ellos. A partir de este lugar se fue creando lo que se convertiría en estos espléndidos jardines. Estaréis de acuerdo conmigo en que, visto así, nos hace recordar en cierto modo lo que hoy en día denominamos ‘jardín de guerrilla’. Es realmente curioso ¿verdad?.
En la actualidad los Jardines del Real también se conocen como Los Viveros, ya que en 1903 fue usado por el Ayuntamiento de Valencia para vivero de árboles. En 1912 es cuando realmente adquiere la fisonomía de parque municipal para uso de todos los ciudadanos.
Al final de esta entrada os dejo un enlace muy interesante que facilita los detalles acerca de estos magníficos jardines en el corazón de Valencia.