Dedicado a todos aquellos que de verdad aman las plantas. A los que lo hacen en el más absoluto de los anonimatos. Sin coronas de laurel. Sin competitividad. Sin blog. Sin creerse más listo que nadie. Dedico este post, de todo corazón, a todos aquellos que a diario trabajan con las plantas y lo hacen con dedicación y esmero. Algunos como medio de vida, otros como afición.
Me gustan las plantas y su flores. Pero no presumir de ellas. Me gusta disfrutarlas, observarlas de cerca, recrearme la vista con su belleza, capturarlas con la cámara y compartirlas con quienes quieran contemplarlas. Me gustan las plantas, sí, pero, por encima de todo, lo que más me gusta es mirarlas.