Con la ayuda de los archivos históricos, el cambio de entrada en una de las tiendas exclusivas del Paseo de Gracia de Barcelona, ha permitido crear un mosaico con motivos florales de tonos rosa entre dos de las columnas de mármol de la fachada, recuperando los colores y los motivos de aquellas baldosas que en otro tiempo decoraron las paredes del edificio.
Consiguen llamar la atención entre tanta elegancia, la de una casa construida en 1905 y situada en el epicentro del modernismo catalán. Una de las obras del arquitecto Lluís Domènech i Montaner, reformada (a veces maltratada) en dos ocasiones, la última en 2012 por el estudio de arquitectura de Peter Marino.
En ocasiones veo flores trepando por las paredes y mariposas revoloteando por la casa Lleó i Morera. Como es lógico, no pude evitar ‘llevármelas’ con la cámara, junto con el templete que corona la fachada. Lo que resultó imposible fotografiar fueron las ninfas de Eusebi Arnau, destruidas alrededor de 1940, cuando el edificio se reformó para instalar la tienda de ropa de lujo.
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